DUCATI DARMAH 900SD

He de reconocer que no esperaba hablar nunca, y menos bien, de la, en mi opinión, oscura Ducati 900 SD Darmah. Y es que la Ducati 900SD Darmah, ya en los años 80, era una moto difícil de entender y mas aún de defender, pese a contar con un aún envidiable corazón latino (y es que la 900SS, su hermana melliza con la que comparte propulsor, murió matando, y sin complejos). 

La SD Darmah, era por entonces, y lo peor, así la presentó Ducati, una mala copia italiana de lo que por aquellos años se desembarcaba proveniente de japón. Ducati, olvidando que la razón de su supervivencia fue siempre su carácter latino, jugó a copiar lo que venía del oriente, haciendo todo lo posible por aportar  mas calidad y mejores acabados. Craso error. El resultado no fue otro que aprender a fuego que a Japón no se le gana en su casa, y menos en aquellos años en los que empezaba a disfrutar de las ventajas de una nueva planificación, hasta entonces desconocida, de producción y ventas, a escala mundial.

Pero no todo iba a ser malo y negativo. La Ducati Darmah 900 SD fue siempre apreciada por sus propietarios, aún mas, si cabe, de lo que lo fue la mismísima 900 SS. El Darmah, como era conocido por entonces, aportaba un plus de modernidad y fiabilidad que nada tenía que ver con el carácter tosco y sin compromisos de la 900 SS. Además de eso, el Darmah estaba dirigido a un público completamente diferente, a gentes que estaban muy por encima de las prestaciones deportivas sin mas. Lo que la Ducati Darmah ofrecía era, sencillamente, carácter, calidad y buenos acabados, lo que unido a su elevado precio de venta, la convertían en algo realmente exclusivo.

En lo que a mi respecta, siendo como fui siempre un hombre de Ducati, obvié o mas bien evité la crítica en su momento, y es que por entonces eso era lo fácil. Ahora toca conocer y entender a esta gran desconocida...

continuará....