UN DÍA EN LAS CARRERAS

Momento de reencuentro, el del pasado sábado, 18 de abril. Para los mas añejos, y para los no tanto, entre los que me incluyo, con ya mas de 47 primaveras a cuestas. Sensaciones varias, con algo de desconcierto al principio, al tratarse de una novedad, en un lugar diferente, y con cada vez mas caras nuevas entre las que se unen a tirar de este bonito carro; de la pasión por esto de las ruedas, las dos, en este caso.

Aun así, no tarde mucho en encontrarme como en casa. Los sonidos los de siempre, los colores, los de antaño, y sobre todo, las tres o cuatro caras, que de toda la vida, te recuerdan estás viviendo un momento autentico y sobre todo inolvidable.

En lo que a mi respecta, esa sensación comenzó con el abrazo de Juani Herrera, con esos ojos que comunican tanto; y es que Juani es de esos hombres que cuando saludan, te agitan, tanto en lo físico como en lo mental, con tantas cosas que comentar y compartir. Junto a él, otros tantos, unos de trato directo, otros solo de vista y de ese saludo correspondido, de respeto, y de años y años. Algo curioso ...

En lo que a la celebración en si se refiere, y partiendo de la base de no haber vivido en primera persona aquella época, pues los que me conocen bien saben que esto de las dos ruedas, en mi casa, lo introduje yo, felicitar a la organización por el buen rato, casi día entero, que nos ofreció, permitiéndonos disfrutar a todos, y en especial a los que eran los verdaderos protagonistas del evento, de algo tan entrañable y especial; y es que las caras que vimos en la entrega de reconocimientos, lo decían todo. 

Resumiendo, un sábado, que pese a lo agitado que comenzó, con avería de última hora en una de las motos que teníamos preparadas para la ocasión, nos lo pegamos hablando de motos, motos y también motos; cosa que pese a lo que pueda parecer, no resulta tan difícil de llevar. 

Muchas ganas de encuentro y mas aún de sacar a pasear, y porque no decirlo, lucir, tanta moto clásica y antigua que año tras año se va recuperando; reconociendo así el importante papel que en su momento vivimos en esto del motociclismo a nivel nacional. Todo es ponerse, y creo que el camino emprendido va por la buena dirección. En nuestras queridas islas tenemos patrimonio histórico cultural, en lo que a las dos ruedas se refiere, como para conformar, de una vez por todas, un calendario anual de eventos digno de nuestra realidad. Compañeros de la península, que alucinan con lo que publicamos, de lo que aquí tenemos, disfrutan de una impresionante programación de eventos exclusivamente clásicos. Lo que significa, que hay que ponerse ...

Para finalizar, reiterar el merecido reconocimiento a la organización, animándoles a que prosigan con el camino ya iniciado. Y es que el recuerdo y las vivencias que atesora el circuito del Sebadal, dan para mucho.

Agradecer a los buenos amigos e incondicionales Isidro y Santi Tejera por hacer que varias de nuestras buenas motos disfrutaran de este importante evento.

Nos vemos en la siguiente edición ...